Documento traducido por Liberación
Texto original extraído desde: https://archive.org/details/girls-you-can-hit/mode/1up
¿Por qué los fascistas quieren matar a las mujeres trans?
En un período de nueve días entre el 25 de junio y el 3 de julio [del 2021], seis mujeres trans negras — Brayla Stone, Merci Mack, Shaki Peters, Draya McCarty y Tatiana Hall — fueron encontradas asesinadas. La noticia pasó desapercibida, las mujeres trans negras y racializadas son regularmente asesinadas — y a nadie le sorprende, porque la estructura de género-clase está operando de manera normal. El análisis liberal-individualista afirma que esto es simplemente el resultado de “prejuicios” personales amorfos — que hombres individuales, asustados de lo que no conocen o del cambio, atacan a las mujeres trans por motivos personales.
Esto es idealista y ahistórico, una fantasía reconfortante que naturaliza y atomiza la opresión de las mujeres trans en tanto clase y protege la estructura género-clase que subyace al imperio.
De hecho, los reaccionarios ven a las mujeres trans como un blanco principal. ICE encarcela a mujeres trans en campos de concentración especiales y separados, bajo aún peores condiciones que las de hombres y mujeres cisgénero, y durante las protestas, la policía somete a las mujeres trans a un trato especialmente brutal. El 25 de julio [del 2021], un grupo de manifestantes “pro-policía” afuera de Pittsburgh cambiaron sus gritos de “todas las vidas importan” a “muerte a los transgéneros” y “muerte a los maricones”. El poder del estado y los elementos reaccionarios visan específicamente a las mujeres trans — pero, ¿por qué? Porque la opresión de las mujeres trans en tanto clase es crítica para la estructura género-clase del imperio, y al centrar la opresión de las mujeres trans en nuestro análisis materialista y feminista, podemos comprender esta estructura de clase de forma mucho más clara.
¿Cuál es la estructura género-clase del imperio?
Fundamentalmente, la estructura género-clase se erige a través de la dominación de los hombres blancos sobre las mujeres; las mujeres blancas constituyen una clase subordinada pero privilegiada bajo el control (“protección”) de los hombres blancos, y la masculinidad blanca reaccionaria se define al fin y al cabo por el control sobre las mujeres.
¿Cuál es el rol de las mujeres trans (y de las personas no binarias transfemeninas, que son tratadas como mujeres) en esta estructura género-clase?
Las mujeres trans, personas transfemeninas no binarias, y hombres cisgénero homosexuales que son femeninos son tratades como una clase marginada de género. Estructuralmente, son “chicas a las que se les puede pegar”. También son sujeto de de una cantidad sustancial de violencia sexual en la forma de acoso sexual y violación. Las mujeres cisgénero de naciones oprimidas y colonizadas son tratadas más como “chicas a las que se les puede pegar” si son menos aceptables como potenciales miembros de la clase “protegida” de posibles espozas y madres.
Por ende, las mujeres negras e indígenas son tratadas de forma desechable como “chicas a las que se les puede pegar”. De la misma manera, las trabajadoras sexuales, que son vistas como descalificadas de la clase “protegida” de mujeres, son “chicas a las que se les puede pegar”. Mientras más lejos se ubican de la clase “protegida” de mujeres, más desechables son, y más y más son tratadas como mujeres trans. Esto se desarrolla también de forma interseccional; las mujeres trans negras muchas veces son acusadas de ser trabajadoras sexuales para justificar su trato violento, y las mujeres trans negras que son trabajadoras sexuales son asesinadas cotidianamente.
¿Por qué los hombres cisgénero oprimen a las mujeres trans? En otras palabras, ¿cómo se benefician materialmente los hombres cisgénero de la opresión de las mujeres trans?
Esta dinámica surge en la infancia, donde son un blanco aceptable para la violencia y el sexo encubierto (“chicas de práctica”) de los chicos intentando ejercer la masculinidad. Los hombres pueden lograr un cierto estatus y una identidad como controladores de mujeres al ejercer violencia contra “las chicas a las que se les puede pegar”. “Protegen” a las mujeres (cis, blancas) de la misma forma en que la policía “protege” a la comunidad: ejerciendo violencia sobre la clase marginada, adquieren un control sobre las mujeres de la clase “respetable”.
La amenaza a las mujeres que controlan debería ser implícita, no ejercida: “Si me sirves fielmente, nunca serás violentada como violenté a esas maricas en el colegio”. Pero la otra cara de la moneda es que cualquier mujer “protegida” que se rehúse a cumplir con su rol de forma seria y sostenida puede ser amenazada con una degradación hacia la clase marginada.
¿Por qué las mujeres cisgénero oprimen a las mujeres trans? En otras palabras, ¿cómo se benefician materialmente las mujeres cisgénero de la opresión de las mujeres trans?
Así logran no ser tratadas como mujeres trans, trabajadoras sexuales, y otras “chicas a las que se les puede pegar”. Su estatus de respetabilidad depende de la existencia de una clase marginada a la cual no pertenecen.
¿Cómo encaja la opresión de los hombres trans (y de las personas no binarias transmasculinas, que son tratadas como hombres trans) en esta estructura género-clase?
La amenaza más fuerte contra la vida de una mujer trans es ser tratada como una mujer trans. Para los hombres trans y personas no binarias transmasculinas, la amenaza más fuerte contra su vida es ser tratado como una mujer cis. Vemos como se desarrolla esto en las fantasías fascistas de “corregir” a hombres trans para transformarlos en mujeres cis, y en como las personas transmisóginas como JK Rowling afirman que “activistas trans [con lo que quieren señalar a las mujeres trans de forma encubierta] están seduciendo a tus hijas para que mutilen sus cuerpos sanos, fértiles, femeninos en un intento imposible de devenir hombres”. En la retórica fascista y reaccionaria, los hombres trans son presentados como mujeres cis inocentes que están siendo engañadas y deben ser salvadas de un terrible error. En el mundo material, esta agenda se encarna frecuentemente en violaciones correctivas y otras atrocidades.
Los hombres trans de comunidades colonizadas son tratados de forma mucho más violenta, como es el caso de Tony McDade, que fue asesinado; no existe la posibilidad de obligarlos a ser mujeres “protegidas”, entonces son tratados de forma desechable, como las mujeres trans.
¿Cómo es que la liberación de las mujeres trans amenaza los fundamentos del imperio? En otras palabras, ¿por qué es que los reaccionarios quieren exterminar a las mujeres trans?
Los reaccionarios no se equivocan al ver a la liberación de las mujeres trans (y de las trabajadoras sexuales) como un elemento relacionado a la liberación de las mujeres cis de comunidades colonizadas, ni tampoco se equivocan al fijar el blanco en las mujeres trans.
La liberación de las mujeres trans y de las “chicas a las que se les puede pegar” en general invertiría la estructura género-clase del imperio y le daría un golpe crítico al control de las mujeres “protegidas”, del cual los hombres reaccionarios dependen para la reproducción social, el ejercicio personal del poder y al formación de identidad.
¿Cuáles son las implicancias de esto para nosotres?
Debemos centrarnos en la liberación de las mujeres trans, trabajadoras sexuales y otras “chicas a las que se les puede pegar”. Esto ayudará de manera inmediata a la liberación de las mujeres cis de naciones colonizadas, suprimirá el poder jerárquico que tienen las mujeres “protegidas” (cis, blancas) sobre otras mujeres, degradará el poder que tienen los hombres cisgénero sobre los géneros oprimidos, y eliminará la base para tratar a los hombres trans y las personas transmasculinas como mujeres cis engañadas.