Elisa
Militante de Liberación
Febrero 2024
“Que el odio se vuelva militancia y la militancia amor”
Sin duda la decisión de militar en una organización política revolucionaria es asumir un compromiso colectivo, cargado principalmente de amor por nuestra clase. Lo hacemos porque creemos en la necesidad urgente de generar cambios en una sociedad dañada por los embates del capitalismo, que busca separarnos, explotarnos y generar competencia, contrario precisamente a lo que anhelamos.
Nuestra militancia implica trabajo, responsabilidad y compromiso con lo que creemos y soñamos. Estamos convencidos de que la única forma de combatir al capitalismo y al Estado es mediante la organización. Buscamos crear y desarrollar proyectos políticos que prioricen ciertos elementos, como la horizontalidad. Nos sentimos distantes de los determinismos organizacionales y no creemos en que exista una única forma de organizarse, ya que apostamos por la pluriversidad, es decir, por un mundo donde puedan convivir infinidad de mundos, pues como lo hemos venido diciendo hace tiempo, entendemos que el conjunto de identidades, formas de vivir y habitar el mundo deben abrirse un espacio propio, sin que signifique subordinar o relegar a nadie en el ejercicio propio de autoliberación.
Nos organizamos porque estamos seguros de que es la forma de construir un mundo donde la justicia, la equidad y nuestras libertades se hagan realidad. El habitar un territorio implica convivir con necesidades urgentes de nuestra clase y del mundo que habitamos, es ahí donde adquirir conocimiento sobre las formas de relacionarnos, los saberes que compartimos y también donde se ejerce la solidaridad. En la sociedad que soñamos es menester el desarrollo de los consensos que beneficien a las comunidades en su conjunto, la colaboración en una organización política fomenta la solidaridad entre quienes la componen, forjando el apoyo mutuo, el desarrollo de la empatía para entender estas diversas realidades y poder trabajar en función de ellas mismas.
Nuestra militancia refleja el compromiso con valores, principios y la creencia en que, a través de la acción colectiva, vamos forjando para un presente y un futuro de mejores condiciones materiales de nuestra clase. Resulta inspirador para el desarrollo político ver cómo las acciones colectivas pueden generar un cambio positivo y mejorar las condiciones materiales de vida de mujeres, niñes, disidencias, hombres y el lugar mismo que habitamos.
Militar en una organización que apuesta por el comunismo de liberación es buscar acabar con cualquier tipo de dominación, por eso apostamos a por una política antipatriarcal, anticapitalista, anticárcelaria, antifascista, internacionalista, ecosocial, de autonomía y acción directa.